Al acercarse se percataron de que se trataba del cadáver de un hombre y que el cuerpo presentaba al menos tres balazos, heridas y golpes.
Por eso, los vecinos de la zona dieron aviso a los policías municipales. Ellos tardaron más de cinco horas en llegar al lugar.
Y es que quienes viven en los tiraderos dicen que a los terrenos nunca ingresan las patrullas municipales.
Tal vez por eso y por la falta de iluminación en las noches, los delincuentes utilizan el lugar para arrojar cadáveres. Según los vecinos, es frecuente que encuentren cuerpos abandonados en la zona.
Quienes se acercaron a ver el cadáver dicen que podría tratarse de un hombre apodado “el Omni”. Así lo piensan por un tatuaje de la Santa Muerte que el hombre tenía en el brazo.
El cadáver fue trasladado al anfiteatro de la agencia ministerial en donde se espera que sea reclamado.