Y estas referencias involucran al actor Bill Skarsgård (‘Eso’), quien encarna al Conde Orlok, así como a su compañero Nicholas Hoult, quien da vida a Thomas Hutter, la persona que pretende acabar con el no muerto.
A decir de Nicholas, quien habló para el portal IndieWire, la transformación de su compañero en un ente maligno parece “aterrador” en la cinta: “No es Bill”, dijo contundente.
“Eso es lo preocupante”, añadió Nicholas Hoult. “Ofrece una interpretación realmente transformadora en la que no queda nada de Bill y eso asusta e intimida. Su voz, su físico, es decir, el maquillaje que tiene es realmente un personaje maravilloso e hizo un hermoso trabajo de personaje con él”.

Foto: (IMDB)
Pero fue el mismo Bill quien describió el proceso de dar vida al conde, quien prácticamente succionó todas sus energías.
La estrella de Hollywood declaró previamente a la revista ‘Empire’, sobre ponerse en la piel del siniestro vampiro: “Cuando terminamos, pensé: ‘Nunca más quiero interpretar algo tan malvado. Y nunca más quiero ponerme prótesis’. Dar vida a Orlok realmente me agotó, es un hechicero oculto, y me afectó en términos de tratar de habitar ese espacio.
“La voz fue lo que más trabajé. Durante un mes y medio antes del rodaje, no hice mucho más que grabarme, y en el set seguía haciendo estos ejercicios. Sueno un poco como el canto gutural mongol. Es una locura”, confesó en su momento.