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“Una vecina (es) quien menciona haber visto a un oso hormiguero arriba de un árbol”, indican los informes oficiales.
Bomberos de la localidad acudieron al lugar para resguardar el animal en su base, ubicada en Cuarta Avenida y Calle 22, donde fue canalizado a la Célula de Protección y Bienestar Animal de Nezahualcóyotl.
El oso hormiguero fue entregado al Centro de Conservación de Vida Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), ubicado en el municipio de La Paz, donde médicos zootecnistas revisaron su estado de salud.
El oso hormiguero o tamandúa es un mamífero endémico de México, se puede encontrar principalmente en las tierras bajas tropicales desde Tamaulipas y San Luis Potosí, en la vertiente del Golfo, y Michoacán en la vertiente del Pacífico, hasta el Istmo de Tehuantepec, Chiapas (excepto en las tierras altas templadas) y la Península de Yucatán.
Su nombre significa “trampa de hormigas” debido a que puede detectar su alimento con ayuda de su gran sentido del olfato; su pelaje tupido puede presentar coloraciones que van desde el crema hasta el café dorado y negro, con patrones que asemejan un chaleco.
Mide aproximadamente 1.3 metros y llega a pesar entre 3 y 5 kilógramos, posee una cola que puede medir hasta 70 centímetros, con su característico hocico alargado, carecen de dientes, con un cuerpo robusto y patas cortas, pero fuertes; el tercer dedo de las patas anteriores posee una larga garra que puede llegar a medir hasta 5 centímetros de largo.
Suelen ser solitarios y marcar su territorio con excreciones que son detectadas a largas distancias, hacen sus refugios en oquedades de árboles o en el suelo y cuando se sienten amenazados suben a las copas de los árboles.
Es una especie que se alimenta de insectos, se especializa en hormigas y termitas, y se encuentra listada en la NOM-059 como en peligro de extinción debido a la actividad humana, pues se ha reportado su muerte por atropellamiento, ataque de perros domésticos y, principalmente, por la fragmentación y destrucción de su hábitat.
Aunque estos especímenes son objeto de captura para venta ilegal, raramente sobreviven debido a su dieta altamente especializada.
