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Los concursantes se dieron cita en la isla española, todos con el mismo objetivo, superar un récord que se había establecido con anterioridad en aquella ciudad, en el cual otro grupo de alemanes se bebió mil ciento once cervezas.
El grupo de 13 mujeres y 42 hombres comenzaron a beber cerveza desde las 10:30 de la mañana y concluyeron cerca de la una de la tarde. Esto significa que permanecieron dos horas y media en el bar y cada uno de ellos tuvo que haber bebido más de diez cervezas por hora, es decir, un promedio de veintidós bebidas alcohólicas.
A pesar del impresionante ritmo de ingesta alcohólica, los participantes aseguraron que en realidad habían tardado una hora y media más de lo esperado, pues en un principio habían calculado que terminarían al medio día.
"Todo se hizo de forma ordenada, nadie perdió los nervios ni se salió de tono", afirmó el organizador del evento Kahmann de 62 años, uno de los miembros activos más veteranos de la tropa de bebedores. Después, los participantes se trasladaron al Megapark, donde celebraron la victoria.
El grupo ganó cerca de 55 mil pesos por beberse las 1.234 cervezas, lo que supone unos mil pesos por concursante. ¿El evento conducirá pronto a un nuevo intento de récord? "No lo sé", dijo Kahmann con cautela. No así sus compañeros. Algunos ya se han fijado el número 2 mil 222 como objetivo.
