PREGUNTA
Mira, yo crecí en una casa donde todo era “hombre con mujer y ya". Ahora las cosas cambiaron... Ahora mi hijo de 17 años me dijo que le gustan los hombres, se me desvió. Se me revuelve el estómago del miedo… no por él, sino por la crueldad de la gente. ¿Cómo hago para no fallarle? ¿Cómo se maneja este momento?
RESPUESTA
El susto se maneja entendiendo algo simple: a tu hijo no le pasa nada malo. No está roto, no está desviado, no está perdido. Confía en él. Acompáñalo. Oye sus dudas. Pregúntale cómo quiere que lo apoyes. Enséñale que su casa es un refugio y no un campo de batalla. Cuando una madre abre los brazos, el mundo juzga menos. Y si juzga…él ya sabrá que tiene a dónde volver sin vergüenza.
PREGUNTA
Todo lo que propongo para celebrar el fin de año le molesta a mi esposo. Está tenso e irritable. Me contesta horrible, se desespera de mí, me deja hablando sola. Juro que lo intento, pero lo estoy perdiendo…no quiere festejar conmigo. Me quiere, lo sé. No es eso, es que…apenas llega ya quiere irse. No le pregunto nada, porque no tiene ganas de estar conmigo. No quiere hablar del trabajo, ni de su mamá, ni de nada. Sólo quiere ver televisión. ¿Ando cansada, será que estoy exagerando y si me quiere?
RESPUESTA
Muchas veces la irritación constante viene de resentimientos acumulados que nadie sabe cómo nombrar. A veces es el estrés, la depresión, el agotamiento…pero esto no se resuelve adivinando: se remedia hablando y buscando ayuda juntos. Claro que la distancia duele, la tarea es justamente querer volverse a encontrar. La terapia de pareja es una inversión incluso para separarse como amigos, para no acabar peleados. Ánimo. El amor a veces se apaga, pero también puede renacer y si se transforma y se extingue hay que buscarse y quererse, no quede más.
PREGUNTA
Fantaseo con otras mujeres cuando hago el amor. Mujeres que veo en el metro, en un bar, en la tele. Mujeres grandes, a veces 20 años mayor que yo. Me puedo sentir el más galán tocando a mi mujer con los ojos cerrados y pensando en mujeres anónimas que invaden en mi fantasía. Lo disfruto mucho, con nadie lo comparto. Nunca me compartido con otra; ella es mi única. ¿Soy un hombre con la cabeza desacomodada o lo que me sucede es normal?
RESPUESTA
No eres un traidor ni un subnormal por tener fantasías. La imaginación es un territorio privado donde todos jugamos. La infidelidad ocurre cuando decides actuar, no cuando piensas. Tienes derecho a disfrutar como te dé la gana. No sientas culpas, disfruta. La fantasía no destruye un matrimonio. El agobio sí.
PREGUNTA
Me enteré hace poco que mi esposo me fue infiel, desde entonces me duele respirar, me duele seguir como si nada. Parte de mí quiere irse, pero otra parte quiere entender. ¿Cómo sé si estoy salvando mi matrimonio…o si solo me estoy abandonando a mí misma?
RESPUESTA
Respira: no estás obligada a decidir hoy. Es importante tomarte un tiempo y buscar un espacio donde te puedas sentar a pensar con mucho detalle y tener la capacidad de reconstruir, reparar, transparentarse. ¿Tú, quieres seguir? ¿O solo temes quedarte sola? Quedarse no es cobardía, irse no es heroísmo. Ambas decisiones son válidas cuando nacen del respeto por ti. ¿Quién quiero ser después de esto?
PREGUNTA
Mi mamá se mete en todo: en mi casa, en mi relación, en cómo educo a mis hijos. No puedo. Pero no puedo ponerle límites porque se ofende, llora y me acusa de ser mala hija. No nos hablamos tres días y todo eso me lleva a pasarla mal en lugar de vivir contenta. ¿Cómo le hablo sin perderla?
RESPUESTA
Una relación adulta se fortalece cuando cada uno ocupa su lugar, no cuando uno invade el mundo del otro. Hazle saber que la quieres, que su opinión te importa, Necesitas construir tu hogar a tu manera. Pelear con ella y ser grosera no funciona, tienes que buscar la manera de caminar juntas sin lastimarse. Cuida tu intención: con respeto, firmeza y amor. Los límites no deben ser un portazo: son un respiro.