SU MANO DURA
Parece que donde andan aplicando la ley de la cachiporra, no se sabe bien a bien con qué fines, es en la alcaldía Gustavo A. Madero.
Y es que parece que existe una denuncia con las autoridades de dicha demarcación por abuso de autoridad, pues resulta que el alcalde Janecarlo Lozano, así como algunos de sus directores, decidieron “suspender actividades” de una guardería en la colonia Lindavista sin tener la autoridad para dicho proceso, pues según los afectados, lo hicieron atendiendo un presunto abuso sexual, y si bien el caso podría ser grave, los funcionarios actuaron sin respetar procedimientos.
A Lozano y sus secuaces se les acusa de “violar los principios de legalidad, seguridad jurídica, debido proceso por falta de verificación administrativa previa y ausencia de audiencia”. Del caso ya fue informado el Congreso de la Ciudad de México.
Y LO QUE APURA...
Por cierto que la noche del martes y la mañana del miércoles un bache en la alcaldía Gustavo A. Madero fue el dolor de cabeza de decenas de usuarios, que terminaron con algunas llantas ponchadas.
El agujero en la avenida Central, tras tres días de paso continuó de vehículos y de omisión de las autoridades, se convirtió en una trampa para conductores, sin que nadie atendiera las decenas de quejas de los afectados.
DA LA CARA
El fiscal de Morelos, Edgar Maldonado, ha explicado el caso del panteón “Pedro Amaro”, con el que se busca generar una mala percepción desde algunas trincheras.
Y es que han dicho que se hallaron 83 cadáveres, entre ellos niños y bebés, pero lo cierto, como ha pasado en otros casos, es que se encontraron 83 indicios de restos humanos, que pueden pertenecer a uno, dos, tres o cinco cuerpos, no necesariamente 83; de esos, seis corresponden a infantes y uno a restos fetales.
Dolosamente, dicen que es una fosa, con la intención de que se entienda como algo clandestino, pero es una fosa común utilizada desde hace años y en donde se busca a personas desaparecidas.


