Un hombre de rasgos asiáticos murió acompañado únicamente por botellas de alcohol. Se encontraba bebiendo en las escaleras de una sucursal bancaria en Cuauhtémoc cuando se desvaneció.
Durante la madrugada, el vigilante de los puestos ambulantes de la avenida Juárez, en la colonia Centro, lo vio beber de una botella cubierta por una bolsa. Permaneció sentado hasta poco antes del amanecer; a las 5:00 de la mañana, el testigo se acercó al hombre, que ya yacía recostado en las escalinatas.
Por el color grisáceo de su rostro, el vigilante sospechó el fallecimiento y dio aviso a los comerciantes y a policías que patrullaban la avenida Reforma. Los paramédicos que acudieron al lugar confirmaron que el hombre, de unos 55 años, no presentaba signos de violencia ni portaba documentos que ayudaran a identificarlo. Los agentes indicaron que se trataba de una persona de ojos rasgados, "como chino o coreano".
A pesar de que los comerciantes intentaron cubrir el cadáver con una manta, los policías lo impidieron. Por ello, el cuerpo quedó expuesto ante deportistas y curiosos hasta las 10:00 de la mañana, cuando los peritos arribaron para el levantamiento.