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Misael, de 39 años, trabajador de la alcaldía Iztapalapa, murió cuando iba a recoger un regalo para su sobrino. La explosión de la pipa de gas sobre el Puente de La Concordia, dejó severas quemaduras en su cuerpo, de las cuales no logró sobrevivir. Él iba acompañado de su hija Tiffany, de 17 años, y de su nieto Santiago, de apenas año y medio, quienes están muy graves de salud.
Esta tarde Misael fue velado en su domicilio sobre la calle Cerrada de Pirules, en la colonia Xalpa, de dicha demarcación.
Frente a una corona de flores, Lenin, su hermano, narró las últimas horas, llenas de angustia, que la familia pasó hasta enterrarse de su fallecimiento.
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"Nos enteramos porque empezaron a difundir las listas de heridos, pero él no aparecía. La única persona que salía era mi sobrina y su hijo, pero mi hermano no aparecía. Revisamos en todos los hospitales y nadie sabía nada de él".
Durante toda la madrugada su familia lo buscó hasta que les notificaron de su deceso.
"Fue un peregrinar hasta como las tres de la mañana", contó Lenin.
Lamentablemente no toda la familia pudo estar en el funeral de Misael. Mientras una parte lloraba frente a su féretro, otros estaban el Instituto Nacional de Rehabilitación "Luis Guillermo Ibarra Ibarra", en Tlalpan, donde se encuentra hospitalizada Tiffany, y otros en el Hospital de Tacubaya, donde se encuentra el pequeño Santiago.
"Ya no nos dan muchas esperanzas. Nos dicen que está muy grave", contó Lenin.
Mientras caía la tarde, la casa se llenaba cada de más arreglos florales.
Al sitio llegó la alcaldesa de Iztapalapa, Aleida Alavez Ruiz, quien externó sus condolencias a los familiares y se comprometió a apoyarlos en todo momento.
