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Por: Tania Aguilar
Cuando la familia de Brígida llegó al lugar, encontraron su cadáver, pero ya no vieron al responsable, por lo que pidieron a los policías que les proporcionaran información sobre el detenido, que circulaba en un auto blanco Honda Civic, con placas del Estado de México.
Ante la negativa de las autoridades, sus familiares se enojaron y acusaron que intentaban "tapar" al conductor, quien fue llevado al Ministerio Público.
Al exterior del taller familiar, comenzaron a llegar más personas que conocían a las víctimas. Al borde del llanto, pidieron a los negocios contiguos los videos de las cámaras de seguridad para evitar impunidad en el caso.
-El negocio es de mi tío Leo. Se lo llevaron al hospital muy grave-, refirió una joven.
En la banqueta quedaron esparcidos pedazos del carro, cuya fascia quedó destrozada. También quedó tendida una sábana con sangre, con la cual fue tapado el cuerpo de la señora.
Peritos de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX (FGJCDMX) arribaron al sitio para recabar los indicios correspondientes y hacer el levantamiento del cuerpo de Brígida.
