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Debido a esto también es reconocida como la “Apóstola entre los Apóstoles. Su importancia entre los discípulos fue tan grande que se mencionaba que era la verdadera favorita del maestro, incluso por encima de Pedro.
Ella lo acompañó a Jesús al pie de la cruz siendo junto al apóstol Juan, la única de sus discípulos en estar con él en sus últimos momentos.
Esto le dio el honor de anunciar la “Buena Nueva”, luego de que al buscar los restos del Mesías en su sepulcro, no los encontró y al salir a buscar a alguien que le diera información sobre su paradero, el mismo Cristo se le presentó para que diera fe del milagro de la Resurrección.
Muchas son las historias detrás de María Magdalena. En los evangelios se relata que comenzó a seguir al maestro Jesús luego de que la liberó del “siete demonios” que la poseían.
“Lo acompañaban los Doce y algunas mujeres a quienes había liberado de espíritus malignos y de otras enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que Jesús había hecho salir siete demonios; Juana, la mujer de Cusa, administrador de Herodes; Susana y muchas otras. Todas ellas ayudaban con sus propios recursos a Jesús y sus discípulos” , según el evangelio de San Lucas 8, versículos 2-3.
Uno de los grandes mitos en torno a María Magdalena es su supuesta actividad como prostituta, sin embargo, diversos estudios han señalado que esto es falso y que dicha versión se debe a mal interpretaciones de los textos bíblicos.
Este 22 de julio celebramos a la mujer que más amo nuestro señor Jesucristo ya que ella no dudó en abandonar todo para seguirlo, incluso después de su muerte.
