“Ir al juzgado es lo que me toca. Cada viernes ir al juzgado y ya está. Tampoco tengo mucho qué hacer. El partido que tengo que jugar está en los juzgados”.
Allá donde voy sobrevivo. Yo me adapto a todo porque para mí no es el lugar el que hace a la persona, sino la persona la que hace al lugar. Estoy tranquilo y bien ahora”, comentó el exjugador brasileño de Pumas, Barcelona, entre otros al Periódico de Cataluña.