Asimismo, confirmó los derechos y obligaciones que debe tener una madre, pero enfatizó, en el caso de su nieto, su progenitora debe estar en todos sus sentidos para realizar un buen cuidado del menor.
“No se me ha concedido la guarda y custodia. Yo estoy convencida de que los niños deben estar con su mamá. Siempre voy a defender ese principio. Pero eso sí: Él necesita una madre sana y plena de sus facultades. De más está decir que no pretendo suplir a mi hijo, su pérdida es irremediable y su ausencia permanente. Pero si es mi obligación cuidar el interés de mi nieto”.
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Puntualiza que por el momento solo hay un lugar donde José Julián puede estar tranquilo en estos momentos de polémica. “Por el momento la autoridad ha determinado que el ambiente más idóneo para el menor es con su abuelita, en la casa que habita felizmente desde que nació, en un entorno familiar. En este camino dejaremos la solución en manos de Dios y de las autoridades correspondientes, respetando su criterio, siempre en pro del bienestar mayor de mi nieto”.
Maribel hizo énfasis que por el momento no podrá dar entrevistas por el bien de su nieto, además de que está impedida legalmente para no entorpecer el desarrollo de la investigación.
Finalmente auguró que el feliz reencuentro del niño con su mamá podría darse siempre y cuando su nuera haga un gran esfuerzo por el bienestar de José Julián.
“A Dios pido que su mamá se esfuerce en recuperarse y que cuando eso suceda, el niño pueda regresar con ella en condiciones aptas para su sano desarrollo. Seré la más feliz de que eso suceda. Mientras tanto, en mi casa el niño permanecerá lleno de amor y cuidados de mi propia mano y asumo esta responsabilidad como ha sido desde el día que nació mi nieto”.
