Una vez la trans se encontró en un hotel de la zona, relató que llegaría el personal que la arreglaría para su show, pero los colaboradores de recepción no los dejaban pasar, pues consideraban los peinadores tenían que pagar por otra habitación.
Entre una ola de dimes y diretes entre la influencer y los trabajadores, logró acceder el estilista, pero tiempo más tarde subió un elemento de seguridad y los intimidó para desalojar el lugar.
“Buenas noches, por orden de gerencia tiene que retirarse”, afirmó el personal de seguridad.
“No nos podemos retirar, ellos son influencer y están grabando para YouTube…no me voy a poder retirar, una señorita está de homofóbica…”, indicó el estilista de Vane.

(Foto: Redes sociales)
Momentos posteriores, subieron más personas para reforzar las aparentes órdenes del hotel y los youtubers comenzaron a tomar sus cosas para dejar el cuarto previamente elegido.

(Foto: Redes sociales)
Los argumentos de la hostería fueron que muchas personas ajenas a la reservación original iban a entrar a visitar a Vanessa y una más a peinarla.

(Foto: Redes sociales)
Según la creadora de contenido, ella no cometió ningún delito y fue corrida de la manera más vil.

Al ser una transmisión en vivo, sus fans la apoyaban: “Tía Vane, repórtalos con la CONAPRED”, “Que te regresen tu dinero”, “Vane estamos contigo”, “Todo eso nada más por subir a tu maquillista”, escribieron los seguidores.







