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Sí, existen los milagros, sólo hay que estar atento, preparado y con la veladora encendida, para cuando te toque tu turno.
“Oh, una tormenta está amenazando mi vida entera / si no consigo algún refugio, voy a desaparecer”, Gimme Shelter (The Rolling Stones).
Alejandro Lora de El Tri también logró soñar despierto al abrir un concierto de los ingleses en México. Al igual que los Caifanes, Fobia, Alejandra Guzmán y Little Jesus. No es tarea sencilla, la presión/veneno de los fanáticos del grupo estelar se dejará sentir en todo momento.
Pero como lo venimos escribiendo en esta columna, lo glorioso de la vida son los retos colosales, ir a la cima después de la cima, al cielo después del cielo, a lo imposible.
Por eso la valía de que el mexicano cante en el mismo escenario en el que lo harán los jefes Mick Jagger y Keith Richards. Por un momento no habrá ninguna lógica en el acto, pero qué importa, son de esos errores en la matrix que se ven muy de vez en cuando y Carín le tendrá que poner el pecho a las balas.
En ‘Six Feet Under’ hablan con los muertos fríos y lapidarios, consejeros que ya no tienen nada que perder. Ojalá todos pudiéramos charlar con alguno de ellos de vez en cuando, son sabios desde donde quiera que se encuentren.
Pero si nos ponemos a pensar un poco más a fondo, los vivos tampoco tenemos tanto que perder en esta vida, somos un chasquido en el universo, unos viajeros de paso con ‘Gimme Shelter’ de los Stones como apocalipsis, como soundtrack del final de nuestros días.
El fin de semana pasado la pasamos bien en el Vive Latino, un cielo naranja se dejó mirar en el autódromo. Sin duda la mejor estampa del festival.
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