El cantante costarricense José Pablo está dando mucho de qué hablar con los videos de sus sencillos “Dime corazón” y “Es mi culpa”. Estas producciones forman parte de una película que explora temas complejos como las relaciones entre mujeres y el poliamor, desafiando tabúes y llevando un mensaje sin miedo a la censura.
En “Es mi culpa”, el artista aborda el típico estigma de que los hombres siempre son responsables de las rupturas amorosas. “Es una reflexión sobre cómo las dinámicas en las relaciones no siempre son lo que parecen”, comenta el cantante.
UN ARTISTA CON HISTORIA DE SUPERACIÓN
José Pablo, cuyo nombre real es Warren Esquivel, nació en una cuna humilde en el cantón de Tibás, en San José, Costa Rica. Desde niño mostró su pasión por la música, cantando canciones rancheras. Aunque comenzó a estudiar canto de manera esporádica a los 16 años, fue su experiencia como empresario lo que lo acercó al mundo musical.
Propietario de negocios en sectores como medicina estética, odontología, bienes raíces, desarrollo de software e inteligencia artificial, José Pablo decidió incursionar en la música para promocionar una boletera que estaba desarrollando. Su talento no pasó desapercibido, y con el respaldo de productores reconocidos como Raniero Palm y Jorge Enrique Rodríguez, comenzó un prometedor proyecto musical.
VIDEOS QUE DESAFÍAN LO CONVENCIONAL
Sus canciones, grabadas en Victoria Records en Monterrey, México, han sido acompañadas de videos candentes filmados en Medellín, Colombia. En ellos, José Pablo no teme explorar las emociones intensas y las complicaciones del amor moderno, como lo demuestra en “Es mi culpa” y “Dime corazón”. Este año, el artista prepara el lanzamiento de su próximo sencillo, “Maldito”, una innovadora fusión de cumbia y música ranchera. El video será grabado en Egipto, en un ambicioso proyecto que promete seguir rompiendo esquemas.
Más allá de su música, José Pablo es un filántropo activo que participa en campañas para ayudar a los más desfavorecidos. Su vida es un testimonio de cómo la pasión y el trabajo duro pueden abrir nuevas oportunidades, incluso en campos inesperados.
Con su estilo único y su valentía para abordar temas controversiales, José Pablo continúa posicionándose como una figura destacada en el regional mexicano, dejando claro que los límites existen solo para romperse.