En una serie de historias publicadas en sus redes sociales, Luisito compartió su indignación al haber pagado dos mil pesos por un trayecto de tan solo 20 minutos, desde el aeropuerto hasta su hotel.
“Esto es un abuso total. Están cobrando precios desorbitados por un servicio básico, aprovechándose de los turistas”, expresó molesto el influencer, además de calificar a los taxistas de la zona como “rateros” y que operan como una “mafia respaldada por un sindicato”.







