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Foto: (Cortesía)
“Mi trabajo es ser una juez imparcial. Degustar todos los platillos y dar mis impresiones a los participantes, enseñanzas que los hagan crecer. No vine a hacer amigos, sino a que la gente cocine y aprenda”, cuenta la chef.
Detrás de su aparente rudeza, a Zahie es fácil sacarle una sonrisa, así confesó que llega a la final conmovida y llena de enseñanzas.
“Es precioso. Yo tengo 16 años haciendo televisión en un formato muy diferente. Yo sola, dando recetas y aquí no cocino. Me toca estar del otro lado, aprendiendo de los concursantes y enseñándoles al mismo tiempo. Se puso bien sabrosa la temporada”.
Y aunque según ella no iba a hacer ‘migas’, tras cada participación en el show sale con un puñado de amistades. Esta vez se lleva a Cibernético, a Rey Grupero y Litzi en el corazón, y la temporada pasada cuenta que hizo buena relación con Mónica Dione, Paco Palencia, Fabiola Campomanes y Romina.
