Pasan y pasan los años, pero los New York Giants siguen sin levantar. La apuesta de la gerencia general para resurgir fue darle un contrato millonario a Daniel Jones, esto pese a las dudas que ha dejado como mariscal de campo. 

Por ello, el futuro para la franquicia no parece que vaya a ser distinto al de campañas atrás, al menos en la temporada que se avecina.

Otra de las jugadas arriesgadas que tuvo la gerencia fue dar por terminado el ciclo de Saquon Barkley en la franquicia, y lo peor, fortaleciendo a un rival divisional que de por sí ya cuenta con talento suficiente para imponerse a cualquier equipo.

En el papel, pinta para que New York esté viviendo una temporada más que complicada, sobre todo teniendo a dos rivales como Philadelphia y Dallas, que llevan años siendo los mandones.

Los Giants tienen como misión principal encontrar estabilidad de los dos lados del balón y después, pensar pelear por algo. 

El exPanther Brian Burns fue una de las firmas más importantes, por lo que será uno de los jugadores que tendrá que cargar con el peso de liderar una defensa que tendrá trabajo.

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