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POR CINTHIA GARCÍA
De enero 2005 a septiembre de 2024 han llegado a la fosa común al menos 18 mil 888 elementos (cadáveres, restos, partes de cuerpos y fetos), muchos de estos ya fueron exhumados e inhumados; tan solo de enero a septiembre de este año se han registrado 695 elementos y se han reconocido al menos a 29 personas.
Dentro de este trabajo en conjunto se ha implementado que los cuerpos femeninos cuenten con una fosa “especial” , esto debido a que se busca descartar o poder identificar con mayor facilidad víctimas de feminicidios.
También cuentan con fosas especiales en casos de muertes por enfermedades, como sucedió con el Covid-19, una vez introducidos los cuerpos en estas no se podrán abrir hasta pasados seis meses.
Una última fosa “especial” es la que utilizan para enterrar los cuerpos que son entregados por las universidades, que trabajan con ellos por un año para luego sepultarlos. Otero destaca que los cuerpos que más llegan a la fosa común son de hombres, casi no llegan cadáveres de niños; únicamente fetos y el principal motivo del deceso son accidentes o enfermedades.
