Más Información
Vinieron desde el sur y el norte del país para protestar en contra o despedirse del todavía Presidente de la República; gritaban en las calles Emiliano Zapata, Eduardo Molina, Congreso y Sidar y Rovirosa, frases como: “¡Es un honor estar con Obrador!”, “¡Traidor, Obrador, protege a la nación!” y similares para competir por sus ideologías.
Carlos Rocha, trabajador del Consejo de la Judicatura Federal, con sede en San Lázaro, narró que mientras él y sus compañeros gritaban arengas contra el gobierno morenista, elementos de seguridad se acercaron a ellos con vallas metálicas y los encapsularon. En respuesta, la manifestación subió el volumen y se desplegó en todas las calles que dan acceso al Palacio Legislativo.
Para evitar confrontaciones, otro grupo de trabajadores del PJF, estudiantes de Derecho de diversas universidades y sociedad civil realizaron dos marchas, en el Monumento a la Revolución, para protestar contra la reforma judicial y llamaron a la presidenta Claudia Sheinbaum al diálogo para colocar en el centro la preservación de la independencia judicial y que no se destruya la carrera judicial.
Por más de una hora exclamaron diversas consignas y luego se retiraron pacíficamente del sitio.







