El 2 de octubre se volvió a teñir de sangre en la Ciudad de México… con la muerte de seis personas, entre ellas dos mujeres, y heridas de bala a cuatro más, en cinco ataques distintos. 

El primer caso ocurrió en el local “Micheladas Richard” o “Los Borregos”, en la colonia Morelos, alcaldía Venustiano Carranza, donde sujetos en moto rafaguearon a los clientes. 

En el sitio murieron Marvin Pacheco, de 18 años, y Casandra Juárez, de 33; y resultaron heridas cuatro personas más; fueron 28 disparos en total.

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En tanto, Eduardo Padua, de 31 años, fue asesinado mientras platicaba con una mujer en Rey Nezahualcóyotl y Lázaro Cárdenas, colonia Huayamilpas, alcaldía Coyoacán.

Cerca de las 2:00 de la madrugada, dos sujetos a bordo de una motoneta color azul le dispararon en nueve ocasiones con un arma calibre .40 para luego huir y abandonar el vehículo.

Casi a la misma hora, en la calle Villa San Pedro, de la Colonia Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, en Iztapalapa, Erick Fuentes fue ultimado también de nueve balazos en un ataque directo. Más tarde, cerca del mediodía, el abogado Alfredo Amezcua fue asesinado por un motociclista cuando se encontraba en el cruce de Barranca del Muerto e Insurgentes, colonia Guadalupe Inn, alcaldía Álvaro Obregón. 

El litigante, de 43 años, murió al volante de una camioneta Dodge Journey negra y un sospechoso fue asegurado por la policía.

Por la noche del 2 de octubre, Valeria García –quien era estudiante del IPN– fue hallada sin vida dentro de una vivienda de la colonia Xotepingo, en la alcaldía Coyoacán. Su pareja, Ricardo Barragán, de 19 años, fue detenido como el sospechoso del feminicidio.

En otras noticias de la Ciudad de México, María, comerciante del mercado 2 de Abril, sufrió dos balazos en los glúteos mientras caminaba por calles del Centro; se investiga si el responsable del ataque es su expareja, quien ya intentó matarla en dos ocasiones, por unas propiedades.

Cerca de las 18:15 horas del martes, la mujer de 64 años recibió dos disparos en la esquina de las calles González Ortega y Berriozábal. Al ver que la ambulancia tardaba en llegar, un policía la trasladó a un hospital cercano.

Las indagatorias preliminares de las autoridades apuntan a que el responsable de la agresión es Enrique, “El Coreano”, pues hace 25 años, intentó matarla. 

SILENCIADA. En esa ocasión, los familiares del agresor la llevaron a Querétaro y le regalaron dos propiedades en la calle González Ortega para evitar que lo denunciara.

 Hace dos años, “El Coreano” nuevamente intentó asesinarla para quedarse con los inmuebles. 

Conocidos de la comerciante señalaron que los inmuebles carecen de un papel que avalen la propiedad, porque fueron adquiridos por un trato de palabra. 

Cuando las autoridades revisaron las cámaras del C-2 lograron identificar a dos sujetos que, a bordo de una motocicleta, se dieron a la fuga por el Eje 1 Norte con dirección al oriente. Los agresores llevaban puesto casco y vestían ropa oscura.

La FIscalía inició una indagatoria para esclarecer los hechos.

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