Se trata del peor desastre aéreo civil jamás ocurrido en Corea del Sur. “Se presume que la causa del accidente habría sido un choque con pájaros, combinado con condiciones climáticas adversas”, indicó Lee Jeong-hyun, jefe de bomberos.
Familias se reunieron en el aeropuerto, con esperanzas de que sus seres queridos estuvieran vivos. Al pasar las horas, las esperanzas se desvanecían.
“Los pasajeros fueron expulsados del avión después de colisionar con el muro, dejando pocas posibilidades de sobrevivencia”, explicó un oficial a la gente reunida en el lugar.
Dadas las condiciones en que quedó el avión y la magnitud del incendio, la tarea de reconocimiento de cuerpos no está siendo fácil. Apenas decenas han sido identificados, por medio de pruebas de ADN.
Sólo dos personas un hombre y una mujer, sobrevivieron al accidente. Ambos, parte de la tripulación.
Se establecerán altares conmemorativos en el lugar del accidente, así como en 17 ciudades. Los funcionarios públicos llevarán lazos de luto.