Cocinar te da paz
(Foto: Archivo, El Gráfico)
La cocina con sus aromas, sabores y colores, sensaciones y emociones, es capaz de procurar bienestar y alegría a las personas. Cocinar es una actividad óptima para liberarse del estrés laboral.
Esto viene a cuento porque el estrés laboral es de los principales padecimientos entre los trabajadores y expertos en salud y gastronomía recomiendan incluir actividades culinarias para reducirlo.
Tensión, cosa seria. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) asegura que 75% de los trabajadores mexicanos sufre fatiga por estrés laboral, superando a países como Estados Unidos o China, el mismo porcentaje calcula el IMSS.
Annel Lozano, subdirectora de Wellness en la firma Lockton, señala que “el estrés tiene una implicación en los padecimientos psicoemocionales, los cuales inciden de manera importante en la productividad reduciéndola hasta en un 30%”.
El doctor en Neurociencias, Eduardo Calixto explica que “una persona en estrés constante sufre alteraciones en las relaciones familiares, laborales y consigo mismo”, por lo que su rendimiento se reduce.
Y, sorpresa, dice que al cocinar se utiliza la vista, gusto, olfato y tacto, es una actividad completa, que a corto y mediano plazo puede generar una adicción en sentido positivo.
Esto, “porque del gusto nace en el cerebro una demanda cada vez mayor de esa actividad, en tiempo e intensidad”, asegura Calixto.
Plato de tranquilidad. Pablo Caballero, chef corporativo de Lyncott, empresa mexicana de productos lácteos, opina:
“Lo ideal es que cada empresa tuviera un taller de cocina, donde no sólo se desarrollan capacidades conocidas o no reveladas de los trabajadores y empleados en general, sino que, cuando se aborda en un contexto de compañerismo, mejora el ambiente laboral de la empresa”.
Esto tiene que ver con que “cocinar siempre está relacionado con comer, cuando los trabajadores entran en depresión, lo primero en lo que piensan es en la comida; pero más que comer, cuando estamos en situación de estrés, cocinar siempre resulta reconfortante, te olvidas de las preocupaciones”.
