Lo mejor para producir espuma en algunas bebidas
Ancestral molinillo, gira a toda velocidad
Una herramienta prehispánica que compite con artículos de alta tecnología
Foto: cortesía
El clásico molinillo, al girar entre las palmas de las manos puede alcanzar velocidades de hasta 11 kilómetros por hora, unos 2.5 metros por segundo en 100 milisegundos.
Este hallazgo es obra de científicos del Instituto de Biotecnología de la UNAM, que recuerdan: los antiguos mexicanos, mayas entre ellos, como muestran vasos y códices, tenían la espuma en el chocolate en agua, era una característica deseable, no sólo por su significado espiritual, sino porque mejora su apariencia y textura.
Para generar mayor cantidad de espuma, desde tiempos ancestrales se ha empleado un utensilio aún común en las cocinas mexicanas: el molinillo.
Conocido en náhuatl como aquaujl o aquahuitl, el molinillo es mencionado en el Códice Florentino (1575-1577) por Bernardino de Sahagún, y recientemente fue caracterizado por un grupo del Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM, mediante alta tecnología de imágenes y mezclado, con una cámara que graba hasta 5,000 imágenes por segundo, explicó Enrique Galindo, investigador del Instituto.
Los científicos registraron que ese instrumento tradicional es tan eficiente como equipos modernos usados para la generación de espuma en la industria alimentaria.
El molinillo es fabricado tradicionalmente de madera, tiene diversos diseños que varían en tamaño, número de discos, anillos y diámetros; cantidad de ranuras (dientes o aspas) y profundidad de éstas, así como el largo del mango con el que se sostiene y agita. A pesar de su variedad, se desconocía la razón técnica de cada uno de estos elementos y su posible impacto sobre la calidad de bebida espumosa preparada.
