PREGUNTA
¡Ayuda! Tuve relaciones con mi novia y eyaculé afuera. Un rato después, ella sintió dolor en la parte baja del abdomen y más noche presentó un ligero sangrado con flujo. En su app del ciclo decía que al día siguiente empezaba la ovulación, pero su periodo suele ser irregular. No sabemos si lo que sintió fue por ovulación, si es muy pronto para que pase algo o si hay riesgo de embarazo. Yo eyaculé mucho antes de sentir la sensación y no me he masturbado desde hace más de dos semanas. ¿Qué tan preocupados debemos estar? Ramón D.
RESPUESTA
Ramón, ambos deberían de saber que el coito interrumpido puede tener fallas. El dolor bajo en el abdomen y el ligero sangrado no son signos de embarazo tan pronto. Eso suele deberse más a cambios hormonales, a la ovulación (que en algunas mujeres causa dolor y manchado), al desajuste del ciclo tras dejar anticonceptivos o incluso al estrés. Es demasiado pronto para hablar de fecundación o implantación: eso no ocurre horas después del acto. Lo más sensato es esperar. Si su periodo se retrasa más de una semana, entonces sí vale la pena hacerse una prueba de embarazo para salir de dudas. Y para el futuro, si no quieren vivir con este nivel de angustia, conviene usar un método anticonceptivo más confiable que el “me vine afuera”.
PREGUNTA
Hola. Tengo una duda que me da pena admitir. Me doy cuenta de que me excita provocar un poquito de celos en mi pareja, sentir que otras personas me desean y que él lo note. Ojo: no quiero engañarlo ni andar de loca con alguien más, solo me prende esa sensación. ¿Eso está mal o dice algo negativo de mí? Mariana P.
RESPUESTA
Lo que te prende no es “andar de loca”, es sentirte deseada; eso activa el ego y refuerza la autoestima erótica: te recuerda que sigues siendo atractiva, visible y poderosa. Eso es humano, no perverso. A muchas personas les prende saberse deseadas incluso estando en una relación estable. El problema aparece si se cruza un límite no hablado, si se usa para manipular o si genera inseguridad real en el otro. Pregúntate: ¿lo hago para jugar o para herir? Si se queda en la fantasía, en el coqueteo ligero consensuado o en juegos verbales con tu pareja, no hay nada malo. De hecho, para algunas parejas puede ser un detonador del deseo. Si te excita, vale la pena decirlo: muchas parejas descubren que hablar de estas fantasías, sin llevarlas necesariamente a la acción, enciende más el deseo y la complicidad.
PREGUNTA
Hola, les escribo porque tengo una duda que me da pena preguntar. Usé juguetes anales por primera vez y después me quedó una sensación rara: no es dolor fuerte, más bien como presión, cosquilleo o incomodidad. No sangré ni nada, pero me pregunto si me lastimé o es normal. Fer L.
RESPUESTA
En la mayoría de los casos es normal. El ano y el recto tienen muchísimas terminaciones nerviosas y, después de la estimulación, pueden quedar hipersensibles o, digamos que “cansados”, sobre todo si fue una sesión larga, si se usó un juguete más grande de lo habitual o si faltó lubricación suficiente. Esa sensación de presión o rareza suele desaparecer en horas o al día siguiente. Ahora bien, hay señales de alerta que sí ameritan revisión por ejemplo: dolor intenso que no cede, sangrado persistente, ardor fuerte, fiebre o molestias que duran varios días. Si no tienes nada de eso, lo más probable es que no haya lesión. Para la próxima, recuerda las reglas de oro del juego anal: usa lubricante abundante, ve despacio, escucha a tu cuerpo y usa juguetes con base amplia para evitar lesiones.