PARA DORMIR COMO OSO

Hacer el frutifantástico quita el insomnio, por Lulú Petite

Hacer el frutifantástico quita el insomnio, por Lulú Petite

Hacer el frutifantástico quita el insomnio, por Lulú Petite (Foto: Ilustrativo | Unsplash)

Sexo 07/03/2023 15:08 Lulú Petite Actualizada 15:08
 

Querido diario: ¿No te ha pasado que algunas veces, por más que quieres dormir, no hay modo de conciliar el sueño

Hace unos días, estaba dando vueltas en mi cama, pellizcando la almohada, aventando las cobijas. Por más que trataba de dormirme, no había modo. Me masturbé, puse ruidos de ballenas, conté ovejas imaginarias, bueno, hasta tomé té de lechuga y nada parecía funcionar.

Aburrida y sin conseguir quedarme dormida, tomé el teléfono para ver la hora. Eran ya casi las dos de la madrugada. Abrí el Whats para matar el tiempo. De pronto, recibí un mensaje que decía: “Hola. Te vi en línea”.

Lee también“¿Debo cambiar de morra si a ella le dan asco mis fetiches?”

Era Vicente; un cliente al que hace años no veía. Comenzamos a chatear. La conversación fue fluyendo y, como teníamos insomnio, una cosa llevó a la otra.

Así, ambos en pijama, 20 minutos después nos encontramos en el motel de costumbre. Nunca había ido a una cita de negocios así, en pijama y desmaquillada. Jamás me habría pasado por la cabeza, pero bueno, fue parte del trato y, la verdad, aunque me daba pena, me resultó divertido, además, estaba caliente ¿Faltaba más?

Los amigos del motel, que me conocen por tanto ir, sonrieron al verme llegar así. En la habitación, Vicente me esperaba también en pijama. Apenas entré, nos comimos a besos.

Sus manos hurgaron entre mi ropa y me puso un faje de aquellos. Qué manera de meterme mano la del vato. 

Sin quitarme el bonito pantalón de franela de mi pijama rosa, me puso de perrito, me lo bajó a medio muslo, se puso un condón y comenzó a darme duro.

Me lo hacía con fuerza, mientras apretaba mis nalgas deliciosamente. Su miembro, un poco torcidito hacia arriba, se clavaba en mis entrañas provocando un placer tremendo. 

Él se balanceaba con fuerza, se afianzaba a mi cintura y me lo daba todo. Me vine riquísimo y él también explotó en el condón con potencia.

Después de darnos amor, nos quedamos profundamente dormidos. Como osos. La mejor receta contra el insomnio: hacer el frutifantástico.

Hasta el jueves, Lulú Petite.

Google News - Elgrafico

Comentarios