CONSULTORIO SEXUAL
Culpas y secretos: Confesiones de un hombre que descubrió ser gay estando casado
Resolvemos todas tus dudas e inquietudes íntimas, por más extrañas que parezcan
(Foto: Ilustrativa, ChatGPT)
PREGUNTA: Mi mujer quiere que haga yo de comer los martes y los jueves, que trabajo desde casa; dice que es lo justo. Yo no quiero cambiar a esa forma de repartición de tareas, odio pensarme como el ama de casa, odio pensar que ella me reclame, que me haga ver que no está bien puesta la mesa... y es que desde que gana más que yo, ella se ha empoderado mucho. Por eso no quería dejarla trabajar, yo sabía que esto iba a suceder. ¿Qué debo de hacer?
RESPUESTA: Tener una pareja exitosa implica el mundo, sin tener miedo a dejarse sorprender. No hay nada malo en ser amo de casa, nada malo en atender a tu mujer y procurarse juntos una vida plena. Seguir casado con los roles prestablecidos de antaño te amarra a aquellos que no quieren ir para adelante. Cambia tu discurso, procura a tu mujer y ámala antes de que te deje por machista y obsoleto.
PREGUNTA: Extraño la lluvia y el calorcito. Parece que ahora sí entró el invierno y no me late, porque tengo frío todo el tiempo; lo peor es que a mi marido no le gusta dormir abrazados, ni de chucharita. ¿Qué puedo hacer para motivarlo a abrazarme por las noches?
RESPUESTA: Lo primero, adquiere un pijama caliente y duerme con calcetines puestos. Además, toma un té o un chocolate caliente o un licor, eso te hará entrar en calor. El abrazo al dormir debe de surgir de un sentimiento mutuo y natural. No sirve forzarlo, es necesario desearlo. Hacer el amor antes de conciliar el sueño también quita el frío. Busca seducir a tu pareja y provoca un encuentro sexual cuando tengas ganas de un abrazo.
PREGUNTA: He observado, a través de las experiencias de mi hermano, que los gays son muy desprendidos con sus amantes. No es que quiera generalizar, ni tampoco hacer un juicio; simplemente, me doy cuenta de que hay un desapego sentimental entre los chavos con los que se acuesta. A mí no me sucede eso. Ellos se divierten mucho sin un compromiso, y eso es justo lo que busco yo. ¿En qué radica la diferencia?
RESPUESTA: Lo que describes sólo es el deseo de la carnalidad. Pero en las relaciones gay, como en cualquier otra, también hay experiencias afectivas. La carnalidad es importante y hay un entendido en la búsqueda del placer, de ceder a la química y a la lujuria para darse por el placer de darse. Sin exclusividad alguna. La libertad en
las relaciones gays es común. Ojo, hay también relaciones celosas. No puedes generalizar.
PREGUNTA: Descubrí que soy gay a los 3 años de casado. No fue algo que busqué, me llegó. Desde entonces, las ganas de estar otra vez cerca de un hombre me prende y la relación con mi esposa me pesa más que nunca. Me da pena, me da culpa y dolor. Mi familia es preciosa, pero yo no sé cómo manejar esta situación y vivo en una situación estresante ¿Qué hago?
RESPUESTA: Habla con tu esposa. Debes de estar viviendo un infierno. Sentirte enjaulado es duro. Es horrible sentirte obligado a tener sexo con una persona con la que no sientes afinidad. Eso te va a llenar de frustración. Salir del clóset puede ser difícil, pero es necesario.