Razones inexplicables

Enrique Beas

OPINIÓN 18/08/2019 23:24 Enrique Beas Actualizada 12:32
Es cierto que los seres humanos necesitamos varias oportunidades para desarrollar nuestro potencial en cada rubro al que nos dedicamos en la vida. Es evidente. Pero en el futbol profesional y más en el mexicano, hay muchas oportunidades que pasan más por la relación fácil o la fórmula más sencilla para resolver el problema o el proyecto.
 
Sin darles más vueltas, Javier Torrente perdió ayer la chamba como entrenador del Morelia. Además,  Chelis fue cesado el sábado del banquillo del Puebla. ¿Y saben algo?, era un strike cantado. La cuarta oportunidad del Chelis con La Franja no tenía credibilidad: es un joyero que perdió el estilo y el sustento como técnico. Ha pasado lo mismo una y otra vez y creemos que esa es la fórmula, por un proceso emotivo.  No se requiere ser científico para entender que no hay nada que avale que lo sigan contratando, al menos en la Primera División de México.
 
Lo mismo pasa con Torrente, que en sus últimos proyectos ha perdido la fuerza con la que logró sorprender con el León. Se acabó esa chispa y las probabilidades de que no sea un proyecto exitoso a largo plazo son altas. Pasa lo mismo con el vende humo de La Volpe: desde hace más de 13 años su estilo es obsoleto y conflictivo. En pocas letras: la mayoría de los proyectos que no pintan para jugar la Liguilla en México tienen un común denominador, las razones inexplicables de contratar a los mismos personajes que fracasaron constantemente en su carrera. ¡Bienvenidos, bienvenidos! Al juego de la silla de nuestros técnicos.
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