El que mantenga la calma gana, esto se lo digo sabio público conocedor, en medio de la batalla que libran el programa ‘Ventaneando’ de Azteca y la emisión ‘Intrusos’ de Televisa. Tratando de poner al margen mis afectos personales, es justo reconocer que el programa producido por Carmen Armendáriz lo que ha hecho ha sido presentar información y alguna que otra nota curiosa o divertida que han detonado en escándalos mediáticos. Es su trabajo, de eso se trata y por eso la productora logró gran éxito cuando inició el vespertino del Ajusco hace más de 20 años. ‘Ventaneando’ por su parte, el programa líder que cuenta a su favor con la permanencia de años en el gusto del público, inició una serie de ataques personales hacia algunos que formaron parte de sus filas, que la mera verdad, no son necesarios. La competencia es lo más sano que puede existir, si se entiende como la necesidad de superación diaria; no es compararse con otros, sino con uno mismo para mejorar las cosas sin lastimar a los de junto... eso creo yo. Ahora quienes dan la nota son los periodistas de espectáculos, cuando era una regla, de quienes se debía de informar era de las luminarias presentan discos, obras de teatro, programas de televisión, etc. 

LOS ESPECIALISTAS DE LA TELEVISIÓN

En los programas matutinos siempre hubo especialistas y más en esta época, en la que está tan de moda dar consejos de vida. Y mire usted, es cierto que todos necesitamos de pronto otro punto de vista con respecto a un problema para poder encontrar la solución, pero no es cierto que a millones de personas les sirva el mismo consejo. 

Esta última semana me dediqué a escuchar detenidamente a algunos de estos especialistas, y debo reconocer que sí los hay muy preparados y necesarios en esos espacios, sin embargo. otros hablan temerariamente sobre temas tan delicados como la crianza de los hijos, por ejemplo, olvidando o ignorando por completo el tema de la individualidad. Desde el primer día de vida, esta parte que nos hace únicos se forma por lo innato (lo que traemos de nacimiento) y las experiencias son nuestra hoja de vida. ¿Cómo puede ser, que alguien nos explique a usted y a mí, que las directrices que marcan irresponsablemente algunos ‘especialistas’ son aplicables para todos?, insisto, sólo es pregunta. 

Enfatizo, sí hay verdaderos expertos que hablan con autoridad sobre sus temas, pero existe un porcentaje de charlatanes formados al vapor. Identifíquelos y cuestione como yo su desempeño de su trabajo.