Opinión

Mi mamá fue una mujer entrona, fuerte, decidida, feminista y muy amorosa. Tenía los pantalones bien puestos y se trasladaba en bici en una época en la que eso no era común entre las mujeres. Trabajaba sin descanso y, a la vez, se encargaba de sus tres hijos con verdadera determinación, sola. A ella y a toda madre, les dedico esta columna. 

El 10 de mayo las reconocemos porque sabemos que siempre están “al tiro” por su familia, por su hogar, su trabajo, sus clases (las que aún estudian). 

Hacen de todo y pueden con todo… pero eso no significa que no necesiten un respiro ante el agotamiento.

¿Qué podemos hacer por su bienestar? Para empezar, no asumir que a ellas les toca todo el trabajo del hogar y de la familia. ¡También es tu casa y tus hijos! Además de poner manos a la obra, es importante escucharlas, darles su espacio y respetarlas. 

En la Línea de Seguridad y el Chat de Confianza del Consejo Ciudadano, 55 5533 553, hemos recibido 197 reportes de jefas de familia que están cansadas, sobre todo emocionalmente, debido a la falta de apoyo de su pareja, por el cuidado de los chamacos o el quehacer. 

Si tú eres mamá y ya estás hasta la… coronilla, quiero decirte que se vale pedir ayuda.

Las psicólogas del Consejo te pueden apoyar 24/7 y gratis, desde cualquier parte del país.

Y si eres hijo o pareja, recuerda que no basta con llevarles flores un día. Si quieres regalarle algo, dale tu compromiso y apoyo, para ser a toda madre con ellas, como ellas lo son con nosotros. 

@guerrerochipres