Me apliqué con mi 'garganta profunda'

Me apliqué con mi 'garganta profunda'

(Foto: Archivo, El Gráfico)

Sexo 13/08/2020 12:58 Lulú Petite Actualizada 12:58
 

Querido diario: Abrí los labios despacio para que mi lengua mojara poco a poco su miembro erecto. Con el pulgar y el índice coloqué el condón y lo fui bajando mientras mi boca envolvía su glande. Me la metí toda hasta la garganta.

Desnuda y de rodillas entre sus piernas, mi cabello caía en su vientre mientras me comía su erección. Él metió sus dedos en mi cabello y me lo puso detrás de la oreja. Quería ver cómo su miembro desaparecía en mi boca. Humedecí mis labios para provocar que resbalara mejor, pero a la vez apreté para que sintiera más firme, al entrar a mi boca, usaba la lengua para lamer en círculos ensalibados su glande, mientras mis dedos acariciciaban su escroto que estaba también duro y redondo. Él gemía y movía los pies como si estuiviera en medio de un placer tan grande que le resultaba tormentoso.

Levanté la mirada y sus pupilas se encontraron con las mías. Seguí chupando, pero sosteniéndole la mirada, como retándolo. Él gimió de nuevo.

Acarició mis nalgas, alcanzó uno de mis senos y apretó mi pezón con lujuria, casi desesperadamente. Yo comencé a lubricar. Su estado de excitación me ponía muy cachonda.

Me le quería montar de inmediato, sentir su carne penetrar la mía, provocarme el orgasmo empalada por él, cabalgándolo por mi placer, succioné un par de veces más sólo para sentir los espasmos en su miembro y cómo un chorro de semen salió disparado. Él gimió extasiado y yo le quité el condón y lo tiré a la basura, junto con las ganas que tenía de ser cogida. 

Hasta el martes, Lulú Petite

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