Papá pasea a su hijo muerto del hospital al MP y de ahí a su casa, todos lo rechazaron en Edomex

CIUDAD DE MÉXICO.- Los familiares de Raúl pasearon el cadáver del hombre por diferentes partes de la zona metropolitana, luego de que la víctima fuera asesinada de una puñalada, durante una riña callejera en la colonia Corpus Christi de la alcaldía Álvaro Obregón. 

La mañana del 30 de marzo, Raúl fue agredido presuntamente por Juan Carlos “N”, luego de pasar parte de la madrugada ingiriendo bebidas alcohólicas en calles de la alcaldía Álvaro Obregón. 

La parranda comenzó cerca de las 10:00 de la noche del 29 de marzo y pasadas las 5:00 de la mañana del día siguiente, Raúl y otro hombre, Juan Carlos N, conocido como  “El Alias”, comenzaron a reñir. 

Al escuchar la pelea, la hermana de Raúl salió a ver lo que sucedía. Según mencionó, vio cómo Juan Carlos picó primero a Raúl y luego sacó de entre su ropa un arma de fuego con la que le disparó.

Fue entonces que regresó a casa junto con su hermano herido de muerte. 

Según contó su padre, de nombre José Guadalupe, Raúl tenía una herida de arma blanca “en el pecho” por lo que decidió llevarlo a bordo de un vehículo particular a la Cruz Roja de Lomas Verdes, ubicada a más de 20 kilómetros de su domicilio y ya en el Estado de México. 

Al llegar al lugar y antes de entrar, la encargada de la guardia le dijo que Raúl ya había muerto, por lo que no lo podían recibir y que debían dar vista al Ministerio Público.

Desesperado, el padre de familia acudió a una agencia del MP en el municipio de Naucalpan, que se encuentra próxima a la Cruz Roja para que certificaran la muerte de su hijo. 

Ahí el encargado de turno informó a don José Guadalupe que no podrían hacer nada para ayudarlo y que debía regresar a las inmediaciones de su casa porque fue ahí donde ocurrió la agresión.

El hombre, con el cadáver de su hijo a bordo de su vehículo, regresó hasta su domicilio en la alcaldía Álvaro Obregón y colocó el cadáver en uno de los sillones de la sala, donde lo cubrió con una cobija y se dispuso a llamar a una agencia funeraria para comenzar los trámites por la muerte de Raúl.

Sin embargo, cuando los servicios funerarios llegaron al domicilio de la familia y se percataron que la muerte de Raúl se trataba de un homicidio doloso, rechazaron hacerse cargo del cadáver y recomendaron a la familia avisar a la policía.

Fue hasta el mediodía del otro día que don Raúl salió a la calle en busca de una patrulla. 

Cuando elementos de la SSC-CDMX atendían una denuncia por robo y circulaban sobre Camino a Santa Fe y la calle Eucaliptos, fueron interceptados por don Raúl quien les mencionó que su hijo yacía muerto en la sala de su casa y les contó su supuesta travesía durante la madrugada con el cadavér de su vástago. 

El hombre permitió que los oficiales ingresaran a su casa y ahí confirmaron la muerte de Raúl. 

Cuando oficiales salían de la casa de Raúl, un hombre se acercó para pedirles ayuda. 

Dijo que a punta de pistola le habían arrebatado 2 mil pesos, y dio la media filiación del responsable. Refirió que era un hombre que vestía un chaleco azul marino y un short del mismo color, que escapó sobre la calle Cosamaloapan con dirección a una barranca. 

Los oficiales iniciaron la búsqueda y lograron detener al presunto responsable metros adelante. Cuando lo detuvieron dijo llamarse Juan Carlos “N”, de 21 años, conocido como “El Alias”.

Portaba una pistola color negro y los 2 mil pesos que le arrebató a su víctima. Era el mismo que horas antes presuntamente asesinó a Raúl.

Según registros oficiales, a sus 40 años, Raúl era un delincuente consumado. El hombre estaba relacionado con al menos siete investigaciones. 

Su historial delictivo comenzó en el año 2003 cuando fue detenido por robo, en ese entonces tendría 21 años. El año pasado fue detenido en dos ocasiones: una por “robo a transeunte” y otra por “robo agravado”.

Las autoridades ya investigan los hechos.