Lo despiden
'Pancho Cayagua' se va escoltado y con corridos
Decenas de polis blindaron el Panteón Civil de Dolores; había puro tepiteño
Cuartoscuro
Arriba del puente peatonal que atraviesa avenida Constituyentes, frente al Panteón Civil de Dolores, cuatro policías con armas largas vigilaban.
Del otro lado de la reja, en la entrada principal del cementerio, había un grupo de 100 uniformados.
Los agentes vigilaban a los cientos de visitantes que llegaron en una caravana de motos Pulsar, KTM y Yamaha, y que escoltaban una carroza gris.
A unos 100 metros de la entrada, en el lado oeste del panteón, unas 200 personas rodearon un mausoleo de mosaicos azules.
Gorras, tatuajes, tenis Jordan, chamarras Adidas, mariconeras, latas de cerveza, vasos desechables, cigarros de tabaco y otros de yerba destacaban dentro de la masa de gente que rodeaba el sitio donde sepultaron los restos de “Pancho Cayagua”, fundador de La Unión Tepito.
Alrededor, distribuidos estratégicamente entre las tumbas, algunos policías vigilaban el sepelio desde una distancia prudente.
Cuando una persona ajena al sepelio se acercaba a capturar algunas imágenes, un hombre vestido de negro con el típico atuendo tepiteño (gorra, tenis y bolsa que atraviesa el torso) se les acerca.
“¡No pueden tomar fotos! A ver, enséñenme sus celulares… No vayan a tomar fotos. No se metan en pedos”, amenazaba a los visitantes.
Con música. Corridos y música de banda sonaban durante todo el funeral. Al menos tres agrupaciones distintas se turnaron para despedir al difunto.
Debajo de un carrito de comida chatarra sacaban de vez en cuando latas de cerveza de contrabando, pues en la entrada hubo una revisión y estaba prohibido ingresar armas o bebidas alcohólicas.
Al final de una canción, del centro de la masa de gente soltaron un grupo de palomas blancas, que mientras volaban hicieron juego con las flores de las coronas que rodean al mausoleo. Las miradas no dejan de sentirse en ningún momento. Los presentes observan a todo aquel que se acerque a la ceremonia. Si uno no pertenecía al barrio de Tepito, era identificado enseguida.
Algunos niños también se encuentran en el funeral, quienes a ratos se aburrían y se alejan para jugar entre las tumbas.
Así fue como la muchedumbre dio el último adiós a “Pancho Cayagua”, quien fue asesinado afuera de una Mega Comercial de la delegación Gustavo A. Madero.
(Fotos: Cuartoscuro)
