Ya viene el 2 de febrero y la tamaliza está lista por toda la ciudad, pero hacer los tamales tiene su dificultad, como sucede en Las Gaviotas que, día tras día, se paran de madrugada, como a las 3:00 o 4:00 de la mañana, para tenerlos listos y, en punto de las 7:00, distribuirlos en sus puntos de venta.
(Foto: Especiales)
Sirenia Olivares Jiménez tiene más de 30 años haciendo tamales, desde que se quedó sola con sus tres hijos y tuvo la necesidad de salir adelante; “yo sabía hacer tamales porque mi abuelita cada 2 de noviembre nos ponía a hacer tamales para repartirle a su familia, se me quedó eso y empecé a vender por la necesidad de que no tenía otra fuente de ingreso”, explica la iniciadora de esta ‘coope’ que, tras 14 años de haberse constituido, hoy ya tiene 87 integrantes.
“Luego pusieron la lechería aquí a un lado y veía que todos vendían, y yo dije: ‘¿qué vendó?’ y pues empecé a vender tamales, ese fue mi primer puesto acá adentro de la calle, y ya estoy hasta la esquina. Ese fue el motivo, y espero seguir porque no ha sido fácil levantarlo”, relata doña Sirenia, quien está lista para seguir agrandando su ‘coope’ con el apoyo de Impulso Popular de la Secretaría del Trabajo y Fomento al Empleo (STyFE), y de tener cuatro puestos en Xochimilco, ahora piensa en tener 20.
Sirenia comenzó vendiendo de 20 a 30 tamales diarios, pero fue creciendo, y llegó a tener un acuerdo con tiendas de conveniencia, pero no le convino porque querían que les cambiara los que quedaban, pues la gente los prefiere calientitos que recalentados en el horno de microondas.
Ahora está lista para el 2 de febrero. “Ese día se hace la cola enorme, ponemos una olla de tamales verdes, otra de rajas, otra de mole, otra de dulce, aparte los oaxaqueños y cuatro personas atienden, porque vienen por 20, 30, 50 tamales, y hasta traen sus recipientes”, relata la creadora de Las Gaviotas.
Los tamales que no son frescos, se les llama “fríos” porque son recalentados y se sienten más duritos.
No descansamos porque diario desayuna la gente y no los puedo dejar sin desayunar, sólo el 25 de diciembre y el 1 de enero”, mencionó Sirenia Olivares de Tamales Las Gaviotas.