Después de haber podido ver a los jugadores en acción, Gerardo Martino cuenta hoy con un equipo más sólido después de tanta incertidumbre y de creer que sólo con las divas se podía sacar adelante la Copa Oro.
Será un verano donde el reto será volver a ganar confianza en la zona, golear, no subestimar a los rivales, recuperar ese chip de grandeza de la zona y sin duda en muy poco tiempo cambiar la narrativa de las divas de la Selección