Un sueño. Takahashi, ahora de 63 años, empezó a dibujar en la primaria. Cuando se topó con aquel Mundial, decidió orientar su carrera al futbol, ante la poca popularidad que tenía en su país. “Empecé con el deseo de que Japón pudiera llegar a participar en un Mundial” y su sueño se cumplió hasta 1998.