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El cuadro de los Bermellones tuvo que exigirse hasta la definición por penales para poder vencer al Real Sociedad, que llegaba como favorito a esta instancia de semifinal. El último cuadro que se metió en una final de Copa del Rey por penaltis, había sido el Betis en la ya lejana edición de 2005.
Real Sociedad, con la presión de haber errado un penal al final del primer tiempo por medio de Brais Méndez, tuvo que adelantar líneas para buscar el obligado empate.
El “Vasco” Aguirre reculó al equipo rumbo al final y aguantó hasta al 71, cuando el recién ingresado Mikel Oyarzabal marcó el 1-1 en un disparo cruzado dentro del área.
El empate se prolongó a los tiempos extra. Mallorca se mantuvo firme y aguantó los agregados, siendo el portero Dominik Greif pieza clave.
Llegada la tanda de penales sería cruelmente el mismo Mikel Oyarzabal, que había empatado para la Real, quien fallaría el primer tanto de la tanda. Vedat Muriqi, Manu Morlanes, Omar Mascarell y Nemanja Radonjic, marcaron sus tantos para la visita y sería Sergi Darder quien definiera la histórica clasificación para el club originario de las Islas Baleares.
Esta será la cuarta final para el Mallorca, luego de jugar en 1991, 1998 y 2003, en la que se proclamó campeón. Aguirre entra así a los libros de historia de otro club en España.