La nariz es el primer filtro del proceso respiratorio y tiene un impacto increíble en el cuerpo, ayuda a que el aire llegue en buenas condiciones a los pulmones y distingue hasta diez mil olores diferentes.
El buen funcionamiento de la nariz es vital, ni duda cabe, y hay que cuidarlo, porque hay problemas que afectan la respiración, como tener el tabique nasal desviado y/o los cornetes inflamados.
Paso a paso. Algunas de las cosas que pueden causar mala respiración son fatiga crónica, falta de concentración y poca resistencia a cualquier actividad física. Inclusive, puede ocasionar irritabilidad, ansiedad y depresión.
El otorrinolaringólogo Sergio Ochoa Rico señala que el tabique nasal es una estructura, normalmente recta, que separa los orificios nasales para permitir el paso normal del aire, esta función se afecta cuando se desplaza de la línea media.
“Esto ocasiona la obstrucción parcial de una fosa nasal y dejando un espacio amplio del lado contrario, ocasionando así la alteración del flujo de aire y moco”, explica.
El doctor dice que “es conveniente decir que una desviación del tabique nasal está asociada a una deformidad externa, como es la nariz desviada o torcida, aunque en muchas ocasiones la desviación del tabique no se ve”.
Detalles del problema. El síntoma principal de paciente con tabique nasal desviado es respiración y resequedad bucal, obstrucción nasal, escurrimiento de moco, dolor de cabeza, migraña, sensación de tener oídos tapados, irritación e infección recurrente de garganta.
El otorrinolaringólogo alerta sobre que este problema predispone el desarrollo de cuadro de rinitis alérgica y /o rinosinusitis.
Un alto porcentaje de pacientes ronca y sufre alteraciones del sueño, lo que a largo plazo predispone hipertensión arterial y problemas cardiovasculares.
Sergio Ochoa Rico dice que “una opción para corregir este problema es la septoplastia que mejora la funcionalidad de la nariz, anque no cambia su estética”.
Se puede realizar bajo anestesia general o sedación, los cortes son por dentro y con las nuevas técnicas de mínima invasión se elimina el uso de taponamiento nasal, logrando que la recuperación sea más satisfactoria.
La mayoría de los pacientes requieren de un tratamiento integral para corregir alguna otra estructura afectada de la nariz (ya sean cornetes, senos paranasales).
En opinión el médico se puede combinar con una rinoplastia para alterar la apariencia externa de la nariz, pero esto depende de cada paciente y tipo de desviación.
