Las calles de la Ciudad de México son vistas como una “jungla de asfalto” en la que se impone la ley del más fuerte, y en cuestión de movilidad el peatón es el más débil, pues las calles y avenidas son territorio en disputa de ciclistas, motociclistas y automovilistas.
Es un hecho que en la capital mexicana va en aumento el uso de la bicicleta y en algunas zonas de la urbe se han habilitado vías exclusivas para los ciclistas, rutas seguras, además se han multiplicado las rodadas nocturnas y las estaciones de Ecobici.
El paraíso lejano. La bicicleta gana espacios, pero no seguridad. Los esfuerzos por dar a los ciclistas garantías cuentan, pero están en una etapa muy temprana, aún faltan mejorar la seguridad para el uso de este transporte.
Según estadísticas de la Secretaría de Salud, de 2007 a 2012, el número de ciclistas fallecidos aumentó 5%, lo que se puede traducir en que cada día son atropellados 20 ciclistas y al año fallecen 200 velocipedistas. El tema de la circulación es polémico, los automovilistas y conductores de automotores normalmente culpan a los ciclistas de no respetar ninguna norma, por eso se les ve circular en carriles exclusivos de Metrobús y hacerlo en sentido contrario o por la banqueta sin respeto para el peatón.
La encuestadora De las Heras Demotecnia realizó una encuesta que detalla la opinión de los capitalinos sobre el incremento de ciclistas en la Ciudad de México y el uso de transportes alternativos:
64% de los capitalinos encuestados se mueven en transporte público, 17% utiliza su automóvil, solamente 5% usa la bicicleta.
Sobre la posibilidad que se monten en una bicicleta, 45% de mexicanos entrevistados dijo que ha contemplado la idea, el resto confesó que nunca lo ha visto como una opción.
La principal razón de los encuestados para no usar la bicicleta fue que 34% la considera peligrosa y piensa que no existen vías para el uso seguro de este medio.
No es todo, 22% argumenta que su destino queda muy lejos, 15% no tiene pena y dice que no sabe andar en bicicleta, 10% contestó que no tiene bicicleta y 5%. Sólo el 2% cree o piensa que son muy seguras, según el estudio de Demotecnia.
