Es mentira que los hombres siempre están listos para el sexo, hay días y épocas en que ellos también necesitan relajarse para, además de disfrutar, concluir satisfactoriamente el encuentro. Los maestros del Kamasutra, los hindúes cuentan para ello con un masaje de pene que ayuda, además de relajar, a conectar al varón con su parte más sensible, explorando otras formas de placer independientes al orgasmo. No se trata de masturbación, sino de canalizar la energía del placer. Por eso, el orgasmo y la eyaculación no son el objetivo primordial de este masaje, lo es la exploración de una nueva forma de placer que no se condiciona por factores tradicionales, como alcanzar precisamente ese momento cumbre. Compra El Gráfico y descubre más sobre este tema en tu edición impresa de hoy.
