Hay dos tipos de disfunción eréctil

26/01/2016 13:00 Actualizada 13:03
 

¿Últimamente te ha costado conseguir o mantener una erección lo suficientemente firme para la actividad sexual, en particular, la penetración? Si la respuesta es afirmativa, podría tratarse de disfunción eréctil, un padecimiento que puede afectar a hombres de cualquier edad. 

No entres en pánico. Que tengas problemas de erección de vez en cuando no tiene que ser motivo de preocupación. Incluso que tu pene se niegue a mantenerse firme 2.5 veces de 10 está dentro del rango de lo normal. No hay razón para exigirte un perfecto desempeño el 100% de las veces que intentas tener sexo. Tus órganos sexuales no son máquinas que responden automática y mecánicamente a tus deseos o los deseos de tu pareja. 

La frecuencia con que tiene lugar la pérdida de erección representa un indicador importante en el diagnóstico de la disfunción eréctil. Por unas cuantas veces que hayas tenido dificultad para conseguir o mantener una erección, no puedes decir que tienes un verdadero problema y debes tomar medicamento. Identifica tu tipo de disfunción, hay dos: biológica y situacional. 

Disfunción biológica. Este tipo de disfunción eréctil puede deberse a condiciones de salud ligadas a la hipertensión, la diabetes, el colesterol alto y la obesidad. Algunas de estas complicaciones aparecen con la edad, aunque también las padecen hombres jóvenes. Lo cierto es que estas enfermedades hacen necesaria una mayor estimulación y juego previo al coito para lograr una erección firme. 

Algunos medicamentos pueden ser responsables de la baja respuesta eréctil. La obesidad grave está relacionada con la pérdida de la función sexual. En estos casos, el urólogo podría recetar medicamentos como Cialis, Viagra y Levitra que ayudan a regular el flujo de la sangre en el pene. Muchos hombres pueden recuperar su vida sexual gracias al tratamiento farmacológico.

Disfunción situacional. La disfunción situacional es la dificultad para lograr o mantener una erección de manera temporal en ciertas situaciones. Hay momentos en que deseas conseguirlo, sin ningún éxito. Pero una hora después o al día siguiente lo logras sin dificultad. Esto se debe a que cambian las condiciones o la situación en que te encontrabas, por eso se le llama disfunción situacional. 

Una forma de distinguir entre la disfunción eréctil biológica y situacional es mediante las erecciones matutinas. Si por un periodo considerable no has tenido erecciones matutinas o espontáneas, es muy probable que se trate de disfunción biológica, lo mejor es consultar a un urólogo. Si tienes erecciones matutinas, pero en ocasiones no puedes mantener o lograr una erección, seguramente se debe a un factor externo o situacional. La disfunción situacional tiene como origen la ansiedad. Para lograr una erección firme son necesarias la excitación sexual y la relajación. Cuando una de las dos no está presente (generalmente la relajación debido a nerviosismo o ansiedad), pierdes la erección o no la consigues. El hombre siempre está dispuesto y listo para tener sexo. Esto es lo que nos han hecho creer. Sin embargo, lo cierto es que para que tu pene haga lo que quieres o haga lo que tu pareja quiere, son necesarias varias condiciones.

Es difícil responder sexualmente cuando se está enojado con la pareja. A veces el cansancio imposibilita la erección o el deseo sexual. Hay muchas otras razones por las que, a veces, tu pene, se rehúsa a cooperar durante el sexo. El próximo martes las estaré abordando en esta columna. Mantente pendiente.

Tip

El 70% de las causas de la disfunción eréctil es provocada por enfermedades, mientras que el 30% restante se debe a componentes mixtos, entre ellos el estrés. (sumedico.com)

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Autora: Anabel Ochoa

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Sinopsis: Algunos de los temas que la autora trata de forma clara y con humor son la disfunción eréctil, la educación sexual de toda la familia, la diversidad sexual, la infidelidad y la frigidez, entre otros.

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