Por Irma Gallo
En la escuela de mi hija, una niña le envió a su novio una foto en la que estaba desnuda de la cintura para arriba. Parece que el chico no hizo circular la foto, pero un amigo de él sí.
No tengo que decirles lo mal que se sintió esta chica cuando supo que esa imagen que había enviado como un gesto de amor a su novio ya circulaba por toda la escuela. Y sabemos que los niños y los adolescentes pueden ser muy crueles, así que las burlas no se hicieron esperar.
El asunto llegó hasta el director de secundaria, que por supuesto mandó llamar a los padres de ambos. Les quitaron sus teléfonos a los dos y además les prohibieron volver a hablarse.
Esto es un ejemplo de sexting, una conducta cada vez más generalizada entre los jóvenes, de aproximadamente 14 a 20 años de edad.
¿Qué es exactamente el sexting?
Es enviar mensajes sexuales que por lo general están acompañados de imágenes o videos. La mayor parte del sexting se hace con teléfonos celulares, pero también se puede sextear con una computadora, enviando los mensajes por Messenger de Facebook o por medio de correos electrónicos (aunque es cada vez menos frecuente entre la gente más joven), a los que se les adjuntan imágenes o videos provocativos.
¿Cuáles son los riesgos?
Que la imagen que era para una persona determinada termine al alcance de millones.
Que, a consecuencia de lo anterior, quien envió la imagen se vuelva víctima de bullying y ciberbulliyng (acoso en la red).
Que quien reciba la imagen (y con más razón si la distribuye) pueda ser acusado de pornografía infantil (si quien aparece en la foto es menor de edad).
¿Cómo hablarles a nuestros hijos?
Como hemos dicho muchas veces en esta columna, los adolescentes tienden a hacer todo lo contrario de lo que les prohibimos, así que, evidentemente, la prohibición no es el camino.
Tenemos que ser más inteligentes. Hay que decirles que la expresión de la sexualidad es algo completamente normal y sano, siempre y cuando se haga con las precauciones necesarias, así como para tener relaciones sexuales presenciales hay que usar condón, cuando se sextea también hay que observar ciertas reglas.
Díganle a sus hijos adolescentes que:
Nunca envíen una imagen o video de este tipo a alguien a quien no conozcan bien, y en quien no puedan confiar plenamente.
Pidan a la persona en cuestión que después de verla, borre inmediatamente la imagen (o el video) y, por supuesto, que no la comparta con nadie.
Si se toman una foto o un video atrevido no muestren su cara ni algún otro rasgo particular que pueda identificarlos (cicatrices, tatuajes, etc).
Si reciben una imagen de este tipo NO la circulen y la borren inmediatamente.
Tal vez estos consejos puedan parecerles atrevidos, pero recuerden, papás y mamás, que la educación sexual salva las vidas de nuestros hijos. Y con el auge de las nuevas tecnologías y el internet, es mejor estar enterados de estas nuevas formas que tienen nuestros hijos de relacionarse para que podamos protegerlos.
