La CDMX, epicentro de la trata

La roja 06/12/2016 05:00 Lydiette Carrión Actualizada 08:12
 

En la Ciudad de México, a veces existe la percepción de que la trata de personas es algo que ocurre en otras entidades, otras regiones. Que la ciudad es un burbuja. Sin embargo, de acuerdo con el último Informe de Datos Estadísticos y Georreferenciados de Casos Atendidos por el Sistema Alerta Roja durante 2015, nuestra ciudad es el principal lugar de origen de las víctimas de trata.

En otras palabras: es en la capital donde se enganchan a mujeres, niñas y niños para explotarlos sexualmente.

Y a pesar de que en la ciudad se presentaron 149 denuncias por el delito de trata de personas, sólo se obtuvo una sentencia. Es decir, un nivel de impunidad de 99.33%.

Después de la Ciudad de México, las entidades con mayor incidencia como lugares de origen fueron: Estado de México, Zacatecas, Veracruz, Quintana Roo y Puebla. Los métodos: el levantón, llevarse a las personas por la fuerza, el engaño, incluido el enamoramiento por medio de redes sociales.

EL PELIGRO DE LAS REDES. En 2010, Nallely Francia Morales tenía 18 años y vivía en el sur de la Ciudad de México; daba clases de cerámica y había montado un negocio. Se encontraba bien. Pero conoció a Carlos Alberto, de entonces 17 años y que vivía en Tehuacán, Puebla. Sólo se vieron una vez, pero después, durante varios meses mantuvieron contacto a través de Facebook. 

Para septiembre de 2010, Nallely dejó su negocio, sus amigos y decidió mudarse con Carlos Alberto y su familia a Tehuacán, Puebla. 

Para enero de 2011, Nallely regresó a casa con golpes y quemaduras de cigarro en el cuerpo. Sin embargo, la joven no quiso presentar ninguna denuncia y a los pocos días regresó junto a Carlos Alberto. En febrero de  2011, la familia acompañó a Nallely al domicilio de la madre de Carlos Alberto, en Tehuacán. A inicios de marzo, Nallely informó por teléfono a su familia que habían decidido mudarse a Xalapa, Veracruz. Poco tiempo después dejó de comunicarse. Continúa desaparecida.

De acuerdo con el Informe referido, de 203 casos atendidos en 2015, el 78% siguen desaparecidas, 18% fueron localizadas con vida y 4% sin vida.

En el 67% de los casos, se trató de crimen organizado; en el 33%, de delincuencia común.  En el 3% de los casos culminó con un feminicidio, en el 11% no hay datos y en el 86% no ha terminado en feminicidio, hasta el momento.

UNA DESAPARECIDA MÁS.  Gabriela Martínez Reyna  desapareció el 10 de diciembre de 2010, en la Ciudad de México, cuando tenía 30 años. Aquella tarde, Gabriela informó a su madre que saldría del departamento por un momento a recibir un regalo. La joven bajó. No regresó.

El hijo de Gabriela entonces tenía 11 años. El día de hoy tiene 17. Hasta la fecha no existen líneas de investigación claras al respecto. Desde 2015, la Procuraduría General de la República ofrece una recompensa de hasta un millón y medio de pesos.

CONTRA LAS MÁS JÓVENES.  De acuerdo con el Informe, el rango de edad con mayor número de víctimas es de los 12 a los 18 años. Después el de 18 y un día a 25 años. Las mujeres siguen siendo las más agredidas. De los 203 casos atendidos este años, 186 son del sexo femenino y 17 masculino.  Cabe mencionar que en el caso de los varones, el rango de edad más afectado es el de 1 a 5 años.

Los sectores socioeconómicos más afectados son las personas de ingresos medios, pobreza y pobreza extrema, aunque, señala el Informe, también hay víctimas de capas sociales más altas.

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