A segundos del fin del mundo

Esta semana, el Boletín de Científicos Atómicos ha anunciado que la humanidad se encuentra más cerca que nunca de la autodestrucción. 

Hace 73 años, este grupo de científicos, entre los que se encuentran más de una docena de Premios Nobel, creó el llamado “Reloj del fin del mundo”, que muestra los minutos que quedan hasta las doce de la noche, hora en la que sitúan el fin del mundo. 

En estas siete décadas de historia, cada año, analizando la situación política, social y ambiental del planeta, han anunciado los minutos que faltan para el apocalipsis. 

Ha habido ocasiones en las que han sido bastante optimistas, como en la década de los noventas, cuando el reloj estaba a más de quince minutos de la hecatombe. Sin embargo, esta semana, cuando han hecho pública la hora del reloj para este año, han sido más pesimistas que nunca.

Según ellos, estamos a tan solo cien segundos de destruir a la humanidad y al planeta Tierra. Las causas de esta impactante decisión hay que encontrarlas, según ha explicado la presidenta del Boletín de Científicos Atómicos, Rachel Bronson, en la amenaza nuclear y en el cambio climático. 

“El mundo ha entrado en un período en el que el peligro es alto y el margen de error, bajo. Si los responsables de la toma de decisiones continúan sin actuar, los ciudadanos de todo el mundo deberían hacerse eco de las palabras de la activista climática Greta Thunberg y preguntar: ‘¿Cómo os atrevéis?”, expone Rachel. 

Según los profesionales, el cambio climático es un riesgo muy grave para el ser humano y requiere una respuesta “urgente e inmediata”. Además, la tensión entre Irán y Estados Unidos es otra de las causas que han situado al reloj del fin del mundo a tan solo cien segundos del final.

Según explican los responsables del reloj, los líderes políticos no parecen interesados en garantizar la seguridad internacional.

También han expuesto esta misma semana, los programas nucleares de Irán y Corea del Norte y la inexistente cooperación entre Estados Unidos y Rusia para controlar y garantizar el desarme. 

En la rueda de prensa en la que han dado a conocer la posición del reloj del fin del mundo, no muestran caras sonrientes, sino gestos de preocupación. Y a esta noticia se une, también, las declaraciones del secretario general de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, quien en la Asamblea General de ese organismo ha asegurado: “Veo a cuatro jinetes, cuatro amenazas que se están aproximando y que ponen en peligro el progreso del siglo XXI”. 

En sus polémicas declaraciones, Guterres ha puesto nombre a los cuatro jinetes. El primero de ellos sería “la altísima tensión geoestratégica”, que provoca una amenaza nuclear; el segundo jinete lo identifica con “la crisis climática” que está acabando con la vida de millones de seres vivos. El tercer jinete, expone el secretario, se identifica con la creciente desconfianza global de las instituciones políticas. Y, por último, el apocalipsis sería “el lado oscuro del mundo digital”.