FUTBOL AMERICANO
A través de cápsulas, Cintia Medina comparte su pasión por el futbol americano
Su papá jugó futbol americano y después fue entrenador
Foto: Archivo El Gráfico
Al lado de su padre, Cintia Medina aprendió a querer al futbol americano. Una pasión que nadie le impuso y que acarició durante sus primeros años hasta darse cuenta que ya no podía vivir sin él. “Desde que nací, mi papá jugó futbol americano y después fue entrenador”.
Recuerda las mañanas de domingo siempre en un emparrillado, y el resto de los días en los entrenamientos, “fue parte de mi vida. La conexión que tenía con mi papá me hizo alcanzar disciplina y ser resiliente para superar los malos momentos para sacar lo mejor de las derrotas en la vida”.
Gracias a este deporte es una persona fuerte, segura y empática para entender diferentes realidades, “por eso a donde voy presumo mi amor por el futbol americano”.
Su padre siempre está con ella de alguna forma, aunque marcara distancia en sus preferencias. “Él era vaquero de corazón y desde niña siempre me quise hacer la muy ruda, soy raider porque no quise irle al mismo equipo que mi papá. Cuando me sentaba a ver los juegos lo disfrutaba, pero no hablábamos de formaciones, eso lo aprendí en los entrenamientos, hacía la preparación física y después entendía la estrategia”.
Pasión que ha llevado a otra dimensión, como conductora y analista. “Ha sido complicado tener la credibilidad porque es un mundo hecho para los hombres, pero se ha ido abriendo el espacio. Soy jugadora de ‘flat’ y en todo lo que digo transmito la emoción y pasión que me provoca este deporte”.
Y lo hace a través de cápsulas en sus distintas redes sociales (@cintimedina) con el lema de estar siempre en la línea de golpeo. “Hago previos, pronósticos y análisis, pero sobretodo, comparto que el futbol americano es un deporte formativo.
Con testimonios que nos dicen por qué las personas deben practicar esta disciplina, como los casos de Ramiro Pruneda e Isaac Alarcón, aterrizando lo que les aportó a sus vidas”.
CHÉCALO
AUNQUE es raider de corazón, sus pronósticos para el Súper Bowl, es el choque Cuervos de Baltimore contra Nueva Orléans.