Boxeo Internacional
¡Transformer! Canelo Álvarez sube de categoría para buscar campeonato semipesado
Para el combate de mañana ante el ruso Sergey Kovalev, el Canelo cambió el sufrimiento de la desecación que se necesita para marcar el límite de una división por la exigencia que se necesita para transformar la grasa en músculo
Archivo: El Gráfico
Las Vegas.– Sin que sean necesariamente excluyentes una de la otra, hay dos razones por las que la mayoría de los boxeadores suben de peso: Ya no pueden mantenerse en la división en la que compiten o buscan más dinero.
Saúl Canelo Álvarez no pertenece a la mayoría. Tiene un contrato asegurado de 365 millones de dólares, el más lucrativo en la historia. En cuanto a su físico, al desplazarse dos divisiones para alcanzar a los semicompletos (79 kg), Canelo no busca un nuevo comienzo, sino la continuación de su legado.
Saúl corretea para alcanzar la historia y de paso ganar la aprobación de toda la afición, una pelea que hasta ahora va perdiendo.
Para el combate de mañana ante el ruso Sergey Kovalev, el Canelo cambió el sufrimiento de la desecación que se necesita para marcar el límite de una división por la exigencia que se necesita para transformar la grasa en músculo.
De mayo pasado, cuando peleó contra Daniel Jacobs en Las Vegas, Álvarez aumentó al menos siete kilos que esculpió para dar forma al cuerpo con el que buscará su cuarto cinturón en distintas categorías.
El Canelo está a un triunfo de ser el cuarto boxeador en la historia en ganar títulos desde las 154 libras hasta las 175. Un club al que pertenecen Sugar Ray Leonard, Tommy Hearns y Mike McCallum, miembros del Salón de la Fama.
La pegada de un hombre físicamente más grande como Kovalev será el principal riesgo que afrontará Álvarez. Mañana por la noche, el ruso estará defendiendo el cetro de la OMB, pero Álvarez no llegará como un retador cualquiera.
Una derrota contra un tipo que mide 10 centímetros más, tiene mucho mayor alcance de puños y que subirá al ring por lo menos 10 kilos más pesado, es una gran posibilidad para cualquier boxeador que no se llame Saúl Álvarez.
A pesar de todos los desafíos que implica dar el salto a dos divisiones, el Canelo tiene prohibido perder o tendrá que convivir con las olas de críticas. Asumir riesgos es el precio de la historia que debe pagar el Canelo. El dinero y la fama ya la tiene; le falta la aprobación de la gente.
