Atlantis disfruta que su hijo continúe con su legado y lo trae cortito

Aceptar que existiera un Atlantis Jr. no fue una decisión sencilla para el “Ídolo de los Niños”. No era una cuestión de ego, ni mucho menos. Se trataba de darle seriedad a una historia que construyó por varias décadas y que ni su hijo tiene permitido desprestigiar.

“A mi hijo lo traigo cortito, dándole las técnicas que necesita y cuando luchamos no lo regaño, lo aconsejo acerca de cómo manejar el ring y a los rivales”, comparte el enmascarado.

Sin embargo, es imposible que no lo disfrute. “Hicimos un pacto, él quería debutar como Atlantis Jr. y cumplió con acabar primero su carrera. Como papá lo apoyé en ese sentido y como profesional lo corrijo. Disfrutar una lucha con mi hijo es mágico, le pido que la goce y la sienta para poder transmitirla a la gente, es lo más importante”.

El ring de la Arena México ha sido testigo de sus hazañas, ahí, se convirtió en el verdugo de los enmascarados Villano III y Mano Negra; sobre él, no olvida sus raíces y a ellas se aferra para encausar a su muchacho. “La disciplina que aprendí del Diablo Velasco era de estar en el gimnasio y tener una buen alimentación. Vengo a aprender a este cuadrilátero, porque en la lucha libre no se deja de aprender, entreno siete veces a la semana y mi hijo debe hacerlo igual para llegar lejos”.

Desde la mirada de su padre, Atlantis Jr. tiene que alcanzar un nivel muy superior al resto de su generación, “pero el público es el que hace y deshace, ha tenido una buena aceptación. Es un muchacho muy disciplinado, le gusta la lucha libre y portar mi nombre. Pero sabe que es una máscara muy grande y no quiero que sea mejor que yo, sino superior, con el tiempo lo va a conseguir”.

Reto que luce amenazador pero que no intimida al muchacho. “Nos ha ido bien, he seguido sus consejos arriba y abajo del ring, así que me siento contento con las oportunidades que están llegando”.

Lejos de chocar como profesionales, su relación ha crecido en la nueva trinchera que comparten. “Es una relación única, lo admiro y pasamos más tiempo juntos, siento que no solo ha mejorado sino que vive el mejor momento. Me ayuda a estudiar a los rivales, y su experiencia es vital para darle batalla a cualquiera”.