Espionaje en el derbi de Génova

Mientras los futbolistas de Sampdoria preparan movimientos ocultos en su cuartel general de Boliasco, un pequeño escondite lejos del bullicio de la sexta ciudad más poblada del país,  para sorprender a su  máximo rival en el derbi de Génova,  descubrieron a un espía.

Los jugadores se sorprendieron al ver que algo se movía entre los arbustos , un par de encargados del club decidieron acabar con las dudas y descubrieron a un hombre vestido con ropa de camuflaje.

El espía sorprendido era Luca De Pra, preparador de porteros de la cartnera del Génova y nieto de Giovanni De Pra, el mejor portero de la historia del club.

Según la versión del Génova, actuó solo. "Nadie del club envió a Luca De Pra a espiar la sesión de entrenamiento en Blogiasco. Fue una iniciativa personal", explica el conjunto que preside Enrico Preziosi, fundador de Giochi Preziosi. 

De acuerdo con abc, la historia resume lo que significa el "derbi de la linterna", el duelo entre los dos equipos de Génova que llevan más de medio siglo enfrentados sobre la hierba del Luigi Ferraris, el estadio que comparten. 

A un lado el Génova, el decano del "calcio", fundado en 1893 e incapaz de ganar la Serie A desde 1924. Al otro lado la Sampdoria, uno de los equipos más jóvenes del fútbol italiano, fruto de la unión del Andrea Doria y el la Sampierdarenese, equipos de la primera mitad del siglo pasado. 

Una rivalidad eterna, entendida la victoria en un derbi como casi el éxito de la temporada.