La contaminación ambiental vuelve a ser tema en la agenda capitalina, Mancera anunció que de marzo a junio dejarán de circular todos los autos un día a la semana y un fin de semana al mes, es decir, volvemos casi al mismo modelo de programa que implementó el finado Manuel Camacho Solís a finales de los años ochenta. El influyentismo y el sistema de castas que prevalece en México desde tiempos de La Colonia trajo algunas excepciones como los hologramas cero y doble cero para salvar a algunos de la norma.

El problema es que no hay superficie de rodamiento suficiente para tantos carros. Hay que añadir que el sistema de transporte público no es eficiente y el transporte de carga federal no está sometido a la verificación vehicular mecánica, generando así buena parte de los llamados precursores del ozono en la atmósfera. Antes del anunció oficial del gobierno federal, Miguel Ángel Mancera adelantó el resolutivo que indignó al agente contaminante cautivo, los dueños de los autos, que ahora buscarán comprar otro coche de medio uso. Igual ocurrió a finales del siglo pasado para sortear el programa Hoy No Circula. El jefe de gobierno del DF no obtuvo el respaldo de los gobernadores de Hidalgo y Puebla para sumarse al polémico programa de restricción vehicular en las respectivas capitales de sus estados.

La intención de Semarnat por tomar el control de la calidad del aire en el Valle de México tiene como fondo cerrar los actuales verificentros para otorgar las concesiones a las agencias distribuidoras de autos que pondrán en marcha un nuevo modelo de verificación mecánica; por ello, el gobierno está endureciendo los protocolos de regulación para forzar el cierre de los actuales. Negocio redondo para la industria de las cuatro ruedas.

El año pasado, el GDF cerró más de 26 verificentros al detectar diversas prácticas de corrupción, el famoso "brinco" una de ellas; no fue suficiente. Ante la incapacidad de otorgar certidumbre a los ciudadanos, el GDF cede terreno y autonomía ante el gobierno federal. Mal para la izquierda.

Periscopio. En el año 2001, la Cámara de Diputados le negó al ‘Ejército Zapatista' el uso de la máxima tribuna de la nación para dirigirse al pueblo de México. Ahora en 2016, César Camacho Quiroz, líder de la bancada del PRI, niega la tribuna a los padres de los 43 porque es "juridícamente inviable", el argumento de 2001 fue el mismo y que los ‘zapatistas' estaban encapuchados.

En el radar. El próximo domingo inicia el horario de verano, adelante su reloj una hora. También inicia el proceso electoral en 14 estados del país en busca del voto de 52% del electorado nacional. Aquí, la recomendación es atrasar el reloj seis años, ya que los ciudadanos escucharán las recurrentes promesas de los partidos políticos y de los llamados candidatos independientes.

Bitácora de lo absurdo. El gobernador del estado de México aprendió de la peor manera que el elogio en boca propia es vituperio. A la luz del reconocimiento "medalla del mérito administrativo y fiscal 2015", que prentendía otorgarle el mismo gobierno que encabeza, Eruviel Ávila tuvo que excusarse de tal honor ante la oleada de críticas que le cayeron en las redes sociales. Pero también hubo un intento de manipular al lector por parte del blog de noticias Animal Político; al dar a conocer el dato publicado en la Gaceta del Gobierno del Estado de México el pasado 15 de enero de 2016, ya que se afirmaba que el premio ya había sido recibido (como lo anotó la Revista Etcétera). Además, al poner una fotografía de archivo de una ceremonia de premiación se sugería que pertenecía a la entrega del llamado premio "Eruviel". Más allá de lo grotesco del reconocimiento a sí mismo del gobernador, la nota representa una señal de las fisuras internas del PRI de cara a la elección presidencial de 2018. No nos sorprenda que se intensifique el ‘fuego amigo' tricolor para bajar al mexiquense de la contienda, a pesar de lo inflado que hoy lo tiene Televisa con tantas menciones a la gestión del gobernador en sus espacios informativos.

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