Conocimiento para un México mejor

OPINIÓN 08/04/2014 05:00 Actualizada 05:00

Enfermedades emergentes como diabetes, VIH-Sida y Alzheimer; carencias sociales como hambre, pobreza y miseria extrema; retos ambientales como el calentamiento global, la conservación y el aprovechamiento de fuentes de energía, la biodiversidad, y oportunidades de crecimiento como la adquisición de la economía digital y la manufactura avanzada, forman parte de una serie de iniciativas que desde el Foro Consultivo Científico y Tecnológico, AC (FCCyT) ha convocado a diversas redes de investigadores, especialistas y expertos, quienes contribuyen así a brindar las mejores aplicaciones del conocimiento basado en ciencia, tecnología e innovación para hacer frente a los grandes problemas.

Esta decena de acciones, llamadas Iniciativas Estratégicas, reúnen a las más reconocidas personalidades de la CTI en nuestro país. Mujeres y hombres que hacen ciencia y tecnología para la innovación –algunos de los cuales inclusive han sido funcionarios públicos– iniciaron en 2013 una serie de diagnósticos precisos sobre el estado que guarda nuestro país en estos temas, sobre los cuales recomendaron en documentos rigurosos las mejores líneas de acción para mitigar o resolver estos problemas que provocan cuantiosas pérdidas, tanto en lo social como en lo económico, y que sirven de base para alimentar los necesarios procesos de toma de decisión y también al diseño de políticas públicas al respecto.

Las Iniciativas Estratégicas que atienden asuntos de urgente y necesaria solución son: Enfermedades emergentes, Seguridad alimentaria, Sustentabilidad energética, Aprovechamiento y conservación de la biodiversidad, Seguridad ciudadana, Mitigación y adaptación del cambio climático, Manufactura avanzada, Economía digital, Seguridad hídrica y derecho al agua, y una transversal que plantea la creación de una red nacional para la modernización de la infraestructura de la investigación y la educación superior.

En resumen, enfermedades como la diabetes mellitus tipo 2, así como la obesidad y el sobrepeso a las que está asociada, significan pérdidas muy costosas para las familias y el país en general. Prevenir, detectar a tiempo y establecer estrategias de control para sensibilizar a la población sobre sus hábitos de consumo y alimentación, reducir el número de casos y mejorar la atención de pacientes para que puedan vivir y desarrollarse en condiciones de calidad y decoro, recuperaría lo más valioso que tiene cualquier sociedad: su gente.

Cuando hombres y mujeres de la ciencia, la tecnología y la innovación unen sus conocimientos y su experiencia a favor de políticas que, desde abajo, recogen las preocupaciones de la gente y hacen frente a los grandes problemas, el producto no puede ser otro que un futuro mejor.

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